La leche frita es un postre típico de España que se puede encontrar en muchos restaurantes. Es una preparación simple pero deliciosa que consiste en una mezcla de leche y azúcar que se cocina hasta que se forma una crema densa y suave. Si bien se suele servir caliente, algunas personas la preparan y comen fría.
Para preparar leche frita, comienza mezclando en una olla la leche, el azúcar y una pizca de sal. Luego, calienta la mezcla a fuego medio, revolviendo constantemente para que no se pegue al fondo de la olla. Una vez que la mezcla comience a hervir, baja el fuego y sigue revolviendo. Esta es la parte más importante de la preparación, ya que la mezcla debe hervir durante unos 15 minutos a fuego lento para que se forme la crema.
Una vez que la mezcla se haya espesado, puedes añadir algunos sabores como canela, vainilla o nueces. Esto es opcional, pero le dará un sabor único a tu leche frita. Después de añadir los sabores, sigue revolviendo durante otros 5 minutos a fuego lento.
Cuando la mezcla se haya espesado y adquirido una consistencia cremosa, retírala del fuego y deja que se enfríe un poco antes de servir. Puedes servirla caliente o fría, según tus preferencias. Si la deseas, puedes acompañarla con algunas galletas saladas para darle un toque crujiente.
La leche frita es uno de esos postres que puedes hacer fácilmente en casa. Si sigues estos pasos, estamos seguros de que te saldrá una rica leche frita para disfrutar en familia. ¡Disfruta!